Entrando fui con mi grupo del grado pasado, a todos los grupos de último año nos mandaron a el primer edificio para asignarnos nuestro salón y si se era el caso cambiar de grupo a ciertos alumnos.
Una vez estando en el salón comenzaron a pasar lista de los alumnos que estarían en el grupo, al no escuchar mi nombre sentí una sensación de tristeza por que me habían cambiado a un nuevo grupo.
Un profesor me llevo a mi nuevo grupo y tenía la actitud más desagradable ya que yo no quería un grupo nuevo.
Durante un tiempo fui muy grosero con todos los de grupo, no llegue a hablarle a nadie.
Pero al pasar los días le fui hablando a siete de mis compañeros, ellos creían que yo era alguien muy payaso y yo creía lo mismo de ellos, incluso algunos me caían mal, sus nombres son: Jazmín, Jessica, Alejandro, Leslye, Leonardo, Itzel y Baruch.
Comenzamos hablando de ves en cuando, nos comenzamos a juntar en los recesos y comenzó a hacerse del diario.
Comenzamos a darnos cuenta que teníamos muchísimas cosas en común.
Cada día nos reíamos de todo, nos burlábamos de cualquier cosa y éramos unos groseros con los demás pero nos divertía aunque fuera algo cruel.
Las clases con ellos eran muy divertidas, no hacíamos nada y nos regañaban por estar jugando.
Salíamos a muchos lugares juntos y pasábamos momentos increíbles.
No podría resumir todas las cosas que he pasado con ellos ya que son muchísimas, pero han sido de las mejores.
Cada uno de ellos me hizo ese último año de secundaria el mejor.
Son de las pocas personas a las cuales consideró mis amigos.
Realmente los quiero muchísimo, son lo mejor.